Hoy mi dueño con las prisas se ha dejado una bolsa de plástico encima de la cama, la verdad cuando llega tarde a algún sitio es la persona más despistada del mundo y no sé como aun no se ha dejado alguna vez la cabeza en casa. Pero bueno… la verdad es que a mí me viene bien, con lo cotilla que soy tengo que descubrir que hay dentro.
Y no estoy solo, se ve que esta cosa del efecto cotilla es inherente a los peluches, Txulo también se ha sumado en la inspección bursátil. ¡Qué emoción!
Alá. Son retales de ropa. La verdad, vosotros quizá no lo entendáis, pero para un peluche encontrar retales de ropa, trapos, almohadas,…. Bueno abrevio que la lista es larga, lo que quería decir es que para los peluches estas cosas es un gran entretenimiento.
Muy pronto, Leonardo, como buen sabueso también ha detectado los retales. Los tres hemos empezado una guerra de retales, nos hemos revolcado entre ellos, mmmm que gustazo, que sensación tan agradable y ya como colofón a esta fiesta de retales… nos hemos puesto guapos. Confección de ropa peluchil a medida. Juzgad vosotros mismos, esta foto bien podría ser una portada de VOGUE.
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