ANDORRA. ESTANY D'ENGOLASTERS

Hace días que no estaba por aquí, y no es que no quisiera escribir un comunicado, no, todo lo contrario, tenía ganas de volver a estar en el ordenador y poder hacerlo. Pero mis dueños han estado de vacaciones, y me propusieron ir con ellos, a lo que yo, rápidamente acepté. He recorrido bastantes kilómetros, salí de Reus, fuimos a Zaragoza, allí estuvimos unos días y luego, desde allí hacia Andorra. Donde estuvimos una semana. Luego para Zaragoza otra vez y ya de nuevo en casita.
Lo que más me gustó de estas vacaciones fueron los paisajes de Andorra, únicos, todo verde, lagos, vacas.. y lo que menos me gustó fue que no pude comer flaM ningún día.
En este primer comunicado de las vacaciones me gustaría comentar la primera de las excursiones a la que me llevaron por Andorra. Una visita al lago de Engolasters. (Estany d’Engolasters).
Como buen turista, me llevé una pequeña guía de Andorra, para ir conociendo más cosas.


Según mi libro, existe una leyenda que allí se encuentra un pueblo sumergido por la ira divina y que aún se localiza en su fondo. Y es que hace muchos siglos, en el lugar donde hoy está el bello lago, existía una población próspera, aunque con unos corazones muy duros. Un día de invierno apareció un hombre medio muerto de frío y de hambre. Rogó en diversas puertas que le dieran algo de comer y un techo donde cobijarse. Todos los habitantes le negaron la entrada. Finalmente acudió a la panadería. Allí pidió a la dueña: “¿Puede, buena mujer, repasar con el cuchillo lo que quede en la panera y hacerme un poco de pan? ¡Es que me muero de hambre!”.
Y así lo hizo la mujer, pero al ver que le salía un hermoso pan, decidió venderlo y echar al mendigo de sus aposentos. El pobre acabó marchándose de la panadería, maldiciendo y muerto de hambre y frío.
Una bella joven que pasaba por la puerta de la panadería vio lo que sucedía, y llena de misericordia le invitó a que recogiera una hogaza de pan del hostal donde vivía. El mendigo le besó las manos y le dijo: “Gracias, chiquilla, pues tú has tenido compasión de mí; por lo tanto, vete corriendo y sólo así podrás salvar la vida”.
Cuando la joven se marchó del pueblo, sonaron los truenos y una avalancha de agua se cernió sobre el pueblo, convirtiendo aquel llano en el lago que conocemos ahora.

También explica el libro que las brujas de Andorra ascendían hasta el lago para celebrar aquelarres, completamente desnudas. Más de un hombre de aquellos valles iba a verlas bañarse desarropadas. Cuando las brujas lo supieron hicieron un encantamiento para que cualquier hombre que subiera al lugar se convirtiera, de forma inmediata, en gato negro. Cuenta la tradición que, al poco tiempo, Andorra contaba con un buen número de gatos negros.

La excursión en sencilla. Llegamos en coche hasta bastante cerca. A partir de ahí, y con el coche debidamente aparcado en el aparcamiento, continuamos andando. Justo al lado del aparcamiento y por el camino al lago, pudimos ver animales de granja, ponis, un burro, un jabalí, fue chulo de ver tan de cerca a estos animales, para la gente que vive en la ciudad, a veces es hasta raro poder ver estos animales tan de cerca. Seguimos el camino, es un camino muy fácil y con un nivel de dificultad mínimo por lo que pude ver. Es cierto que yo suelo ir en una mochila, pero a mi alrededor veía gente con sus mascotas, corredores, gente con bicicletas, parejas con el cochecito de bebe e incluso niños pequeños de unos 5 años, a los que se les había organizado una gimkama e iban resolviendo los pequeños enigmas que les esperaban en los alrededores del lago.
La verdad el lago esta bien, por los comentarios que oía, el nivel del agua estaba más bajo de lo normal y en algunas zonas, el agua estancada olía un poco mal, pero no me molesto demasiado. Ah, por cierto, en este lago se pude pescar. Eso si, hace falta licencia, estas licencias son personales e intransferibles y hay para toda la temporada, de una semana o de un día de duración. En Andorra hay muchos puntos de venta donde se pueden conseguir el permiso de pesca y una tarjeta completa de los lugares dónde pescar.
Después de la visita al lago, y ya cuando volvíamos al coche, pudimos ver en el bosque, una zona llamada, Bosque Aventura, donde habían habilitado un circuito con puentes de cuerda, tirolinas y demás para los más atrevidos.

Una vez llegamos al coche, volvimos a Andorra, comer y pasar la tarde un poco más cosmopolita. Vamos que fuimos de tiendas.

 
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