HELADO DE PIÑA

¡Buen día!

Por fin es viernes. Eso quiere decir que ya tenemos el fin de semana a un pasito. Este fin de semana estoy muy ilusionado, voy a la presentación del libro “El Gall Cantaire”, si, ese del que os hablé hace unos días. A ver si con un poco de suerte me lo dedican, jejeje. Bueno es de que voy, es un decir, la verdad es que me van a llevar, yo no me veo muy capacitado para conducir con mi coche por Barcelona. Bueno, ya os contaré como vaya.

La verdad es que el comunicado de hoy también me hace ilusión, como os explicaba ayer, la semana pasada me llego una receta desde Paraguay, donde me explicaban una forma muy sencilla de hacer un helado riquisísimo. Jejeje. Y como saben que me gusta mucho la piña… pues preparad el delantal…. Es la hora de una de mis recetas, hoy… ¡Helado de Piña!

¿Qué necesitamos?

1 piña grande, fresca y natural.

Hielo picado

Azúcar

Limón (opcional)

Como podéis ver en la foto, yo no tenía una piña natural, tenía una lata de piña natural en su jugo, pero es que en la receta también me explicaban esto. La idea es utilizar la piña natural, pero si no se tiene podemos coger tanto en su jugo como en almíbar. ¿Qué hay que tener en cuenta? Pues el azúcar. Si utilizamos la piña natural tendremos que poner más azúcar, si utilizamos piña en almíbar tendremos que poner mucha menos.

Bueno, ya sea de un tipo u otro de piña, la idea es trocearla y ponerla en la batidora, pero tened en cuenta que si usáis la piña natural, quitadle el corazón, eso amargaría el helado.

Añadimos el azúcar y el hielo picado. Pero si tenéis una batidora como la mía que pica hielo, pues nada, meted directamente los cubitos de hielo

La proporción es un poco a ojo. Pero más o menos sería para un piña grande, un taza de azúcar y 2 o 3 tazas de hielo.

Opcionalmente, podéis poner 1 cucharadita de zumo de limón, eso le da un toque especial.

Lo batimos todo bien batido.

Y listo. Como veis es 5 minutitos está todo hecho. Lo pongo en unos boles o lo que tengáis a mano. Y directo al congelador. Al menos 1 o 2 horas antes de comerlo.

Mmm. La verdad es un postre ideal para el verano. Un helado refrescante y al no tener nata ni huevos es muy digestivo.

Seguro que prepararé más este verano.

Un besito y que tengáis un muy buen fin de semana.

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